En la Prefectura de Ishikawa, región de Chubu, hay más cosas que merecen ser visitadas además de la histórica ciudad de Kanazawa. Tempranito nos encaminamos a la Península de Noto, 100 kilómetros de tierras que se extienden en el Mar de Japón y donde nos esperan paisajes marinos que pasaremos a relatarte en esta guía.
Costa Okunoto
A la Península de Noto es posible dividirla en dos zonas geográficas: la Costa Okunoto y la Costa Noto Kongo. La Costa Noto Kongo tiene solo 14 kilómetros de largo y su mayor atractivo es las rocas que sobresalen de mar con un pequeño templo shinto, Hatago Iwa. La Costa Okunoto (literalmente «Noto interno») cuenta con varias sorpresa, probablemente la primera sea la playa de los autos.
Chirihama Nagisa Driveway – La Playa de los Autos
Chirihama Nagisa Driveway o Chirihama Beach Drive es una playa de ocho kilómetros de largo donde los vehículos andan a sus anchas. Lo que lees, autos y hasta autobuses conduciendo por la playa como quien va por la carretera. ¡A nosotros nos sorprendió mucho! El «carril» es de dos vías y a los playeros no parece molestarles. Es común ver autos aparcados de personas que van específicamente a recolectar almejas para luego venderlas en puestitos de la playa como especialidad.
Terrazas de Arroz Senmaida
«Sistema de Patrimonio Agricola Globalmente Importante», reza el cartel del mirador. La primer parada de nuestro viaje a la península son las Terrazas de Arroz Senmaida. Senmaida significa «mil campos de arroz» y no exagera. Más de mil hileras de campos en forma de terrazas grandes y pequeñas se han cultivado desde la antigüedad sobre la costa marítima.
El grupo local de agricultores Shiroyone Senmaida, continua cultivando y recolectando el arroz a mano para mantener el paisaje original y la esencia sagrada de la agricultura en Japón. De lo contrario, no sería posible porque la zona montañosa dificulta el uso de máquinas.
Los agricultores locales son propietarios y voluntarios de diferentes campos que se unieron para mantener el impresionante paisaje y rescatarlo del abandono que había sufrido por las dificultades que presenta para ser trabajado. Las personas que participan en la producción de estas terrazas de arroz sienten que «incluso un grano es demasiado bueno para perderlo».
Cada pasarela de terraza pertenece a una persona local encargada de mantenerlo y a través de canales irrigan los arrozales. Además del mirador también es posible caminar por las terrazas y bajar hasta la misma orilla donde el mar le lame las patas al arroz.
Granjas de Sal de Okunoto
En la Península de Noto se ha extraído sal de mar para consumo humano por cientos de años. La técnica consiste en recolectar con cubos de madera el agua del océano y desparramarla sobre arena. Los granjeros esperan a que el agua se evapore y luego separan la arena de la sal por un proceso de hervido. Esta producción artesanal aún se conserva en algunas granjas de Okunoto abiertas al público como la granja de sal Suzu-endenmura.
Las granjas son a cielo abierto y por ende se pueden ver desde la misma carretera, pero si te interesa aprender en detalle la técnica y/o comprar un paquete de sal para apoyar su trabajo también es posible visitar la tienda-museo que hay al lado. Nosotros tuvimos mala suerte y ya habían finalizado la jornada laboral. Por suerte los campos están a la vista y nuestra anfitrión nos explicó todo el proceso con lujo de detalles.
Playas de Okunoto
Abandonamos los arrozales y las granjas de sal para hacer una parada en una de las tantas playas de la península.
El agua de mar es transparente y brillante. Bajo ella se esconde un montón de vida marina. Nos sorprendió toparnos con montones de cangrejos ermitaños en los recovecos de las rocas y con coloridas estrellas de mar. Te dejamos marcado en el mapa donde paramos nosotros, aunque suponemos que en cualquier playa rocosa de la zona será igual. Te vamos a dejar marcado también el lugar donde hay una roca con forma de Godzilla. Una piedra que se ha pulido con el mar en forma del reptil. No te esperes algo enorme, es Godzilla versión pequeña.
Mitsukejima
En el camino es posible hacer una parada en la roca Mitsukejima. La enorme roca sobresale 30 metros del mar como una isla (de hecho Mitsukejima significa «isla encontrada») y cuenta la leyenda que el monje budista Kobo Daishi la descubrió mil años atrás. Se puede llegar a la isla por un camino de piedras y la custodian unos toriis que emergen del agua. Como el torii de Miyajima aunque menos grandes y bonitos. En la costa hay una campana que supuestamente trae buena suerte a los amantes que la tocan juntos (¿psicólogo espiritual de parejas?).
Cómo ir a la Península de Noto
Los buses son escasos en la península y algo confusos por lo que hay que confiar en la ayuda de los locales. Lo ideal es ir en auto alquilado. En Japón las moto no son la mejor opción porque no pueden ir por la expressway. Otra posibilidad es hacer dedo y quedarse a dormir en el área, por ejemplo en la ciudad de Wajima que se encuentra un poco antes de llegar a las Terrazas de Arroz Senmaida. Desde Kanazawa a Wajima es posible tomar un bus directo de dos horas con la compañía Hokutetsu Bus.
Mapa de la Península de Noto
Pasear es más sencillo con un mapa. Encuentra los lugares en este que confeccionamos especialmente para ti. ¡Es posible incluso descargarlo y utilizarlo sin internet!
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