Lo bueno de viajar a dedo es que a veces se llega a lugares interesantes gracias a la casualidad. Parecía que la providencia nos quería compensar por la mala experiencia en Koh Rong. Nuestro viaje a dedo desde Phonm Penh, la capital camboyana, había sido poco fructífera y apenas cubrimos kilómetros.
Sin llegar muy lejos decidimos pasar tranquilos la noche en Kampong Cham. Después nos enteramos que es una ciudad comercial del norte bastante grande y que por su posición estratégica sobre el Río Mekong jugó un papel importante durante la colonización Francesa, pero en ese momento simplemente nos resultó un lugar tranquilo y bonito.
Que encontrarás aquí
Cómo llegar
Si hacer dedo no es lo tuyo, la ciudad está bien conectada por buses que vienen desde Phnom Penh (tres horas de viaje) y desde Siem Reap (cinco horas de viaje). El boleto cuesta entre 7 y 9 USD.
Dónde dormir
A pesar de los pocos turistas, encontrar alojamiento y a buen precio es sencillo. Hay una buena variedad de opciones en la zona costera sobre el río Mekong.
Qué ver en Kampong Cham
Wat Nokor
Los pocos turistas que recibe Kampong Cham es por Wat Nokor, un templo budista construido por el Imperio Jemer durante el reinado de Jayavarman VII. Su arquitectura es del mismo estilo que la de los templos de Angkor, en Siem Reap, pero sin las masas de turistas. Como contra, no recibe el mantenimiento que debería.
El templo se encuentra a la entrada de la ciudad, muy cerca de la ruta principal y a unos 4 km del centro. Se puede llegar a pie, en bici o en tuk-tuk. El acceso es gratuito pero notarás que algunos policías corruptos o civiles intentarán engañarte indicando que cuesta un dólar. Pidiéndoles un ticket como comprobante los dejarás descolocados. Lo mejor es tratar de ignorarlos.
Koh Pen y el Puente de Bambú
Una grata actividad para realizar en Kampong Cham es pasear por la costanera que bordea el Mekong disfrutando de las fuentes con esculturas, los monumentos en forma de pedestal con el planeta tierra en su centro, las bandas callejeras de música y las luces de colores decorando el ambiente nocturno. Todo esto paseando por el lado oeste de la costanera. Si cruzas por debajo el enorme puente que une las dos orillas del Mekong en dirección este, a los pocos metros vas a ver un puente de bambú.
Este puente de bambú conecta con la pequeña isla de Koh Pen y todos los años es reconstruido en la estación seca y desmontada en la estación húmeda para evitar ser arrastrada por la crecida del río. Como hoy existen alternativas más modernas para llegar a la isla, el puente de bambú se mantiene únicamente como una atracción y por eso para cruzarlo se cobra un par de dólares. La isla en sí no tiene mucho más que campos de cultivos y si no contás con tiempo se puede obviar.
El Faro Francés y los Templos
Desde el larguísimo puente sobre el Río Mekong se divisa al otro lado un antiguo faro color púrpura. Este faro que supo usarse como torre de vigilancia fue construido durante el Protectorado Francés, cuando la ciudad jugaba un papel importante como punto de comercio de caucho y tabaco.
Más antiguo que los franceses son la mezquita y los templos budistas a ambos lados del río. Uno de los más cercanos y bellos, ubicado sobre la costanera, es el templo budista de Wat Chroy Thma. Monjes jóvenes y viejos se arremolinan en su interior. Sobre la fresca ribera los más adolescentes disfrutan milkshakes de frutas con amigos y los más veteranos actuando acorde a su papel de sabios.
Mapa
Siempre listos para facilitarte el paseo, te dejamos marcado en nuestro mapa todos los puntos de Kampong Cham. Haciendo zoom en la ciudad en seguida aparecen.
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