Kermán se sitúa en el desierto pero a diferencia de Kashan o Yazd la ciudad se ha modernizado más, perdiendo en parte su encanto de ciudad antigua. En comparación nos resultó poco seductora, aunque su cercanía al desierto de Lut le sumó puntos. A continuación te contamos qué ver en Kerman para que después nos cuentes en los comentarios qué te pareció a ti.
Kerman Bazaar, Ganjali Khan Square y Jame Mosque
El bazar de Kermán se extiende 1.2 kilómetros, está repleto de ramificaciones y en su mayoría son a cielo abierto. Su momento de mayor actividad es en la mañana y a última hora de la tarde. A pesar del gentío resulta ser un bazar bastante tranquilo en el que perder la mirada entre los distintos puestitos. Por él se llega al hammam e Ganjali Khan, histórico baño público transformado en museo al que merece la pena entrar si todavía no visitaste ninguno. El costo de entrada es de 500.000 rials.
Ahora, si lo que querés es experimentar un hammam tomando té la mejor opción es que visites la casa de té Hamam Vakil, dispuesto en un antiguo baño público. El lugar suele ofrecer música en vivo y mucho ambiente por lo que cobran una entrada de 30.000 rials que sumado al té de 75.000 rials sigue siendo más económico que el hammam museo.
La zona más bella del bazar es en la antigua plaza Ganjali Khan, reconocible por la coqueta torre de viento que sobresale de su mezquita y su caravanserai (antiguo parador de caravanas). Si todavía no sabés lo que es una torre de viento enterate en la entrada de Irán: qué ver en Yazd. No seas tímido y entra al Ganjali Khan Carevanserai, en su patio interno encontrarás escaleras que llevan al piso superior con varias tiendas de artesanías. La especialidad de Kermán son las alfombras así que aprovecha el bazar para buscar una como la de Aladín.
El bazar va desde la casi serena (omitiendo el ruido de los autos) Plaza Arg hasta la verde rotonda de Moshtaq. Mirando a la rotonda está la Mezquita Jame, o Mezquita de los Viernes, con una más de esas esplendidas entradas iraníes. Toda su fachada está tapizada en azulejos pintados, desde la base hasta su torre del relój.
Ya saliendo completamente del bazar y cruazando al otro lado de Moshtaq square se encuentra la tumba de uno de los líderes sufíes, el santuario Moshtaghiye compuesto de tres domos. Acceso abierto al público. El edificio está en un estado bastante ruinoso y no hay mucho para ver. ¿No sabés lo que es un sufí? Te lo contamos en nuestra guía de el Cairo.
El Parque Jabalieh y el domo Gonbad e-Jabaliyeh
Alejándonos un poco del centro alcanzamos el Domo de Piedra (o Gabri Dome o Jabalieh). Esta cúpula octogonal de piedra y ladrillo (y un poquito de yeso para acomodar los desbarajustes del tiempo) es de origen incierto y se cree que podría haber funcionado como lugar de descanso para un sacerdote zoroastra. El misterioso domo se encuentra en el Parque Jabalieh que nos encantó tanto por sus originales esculturas (incluyendo una alfombra gigante, símbolo de Kermán) como por su paisaje montañoso.
Aprovecha para regresar al centro caminando por Shohada Street y así poder parar en la cascada del Parque Pedar y descansar en la fuente del Parque Sangi. Si desde el Sangi Park caminas dos cuadras más vas a llegar al Parque Asaye Sefid cuyo mayor atractivo es el curioso domo que en el pasado se utilizaba como depósito de hielo. Cómo hacian para que no se les derritiera cuando comenzaba el verano no lo sabemos. Al parecer el domo de barro no era suficiente para atraer turistas y en el parque hay también muchas obras de artes que suelen rotar.
El Parque de las Matemáticas, la Biblioteca Central y Moaiiedi Yakhdan
A esta altura ya habrás notado lo mucho que nos gusta recorrer parques y si hay uno que nos gustó mucho es el Parque de las Matemáticas, donde se sitúa la preciosa Biblioteca Central de Kermán. La biblioteca tiene una primer entrada desde la calle al predio y otra al mismo edificio, es con esta última que se nos cayó la baba.
En este mismo predio encontrarás otra de esas cúpulas de barro antiguas que se usaban para almacenar el hielo durante el verano. Sacamos ventaja a una panadería a la vuelta para probar el dulce típico de Kermán: kolompeh, especie de galletas rellenas de dátiles y nueces con un toque de cardamomo. Se decoran espolvoreándoles pistacho o sésamo triturado.
Desierto de Lut y sus kaluts
Kermán está entre las montañas y Dasht-e-Lut, traducido literalmente como «el desierto del vacío». Vacío en sus 51.000 km2 de extensión, exceptuando una pequeña área a 120 km de Kermán que cada día recibe visitantes. ¿Qué los atrae? Sus kaluts, extraordinarias formaciones de arenisca esculpidas por la madre naturaleza a lo largo de los siglos para que un montón de monos con cámara lleguen cada día a treparlos y hacerles fotos.
Durante el día y especialmente al atardecer está repleto de gente, y sin embargo los kaluts son tan increíblemente bellos que uno hasta logra ignorar los fiesteros con música a tope. Al caer la noche la mayoría se van y quedan unos pocos para dormir bajo el cielo estrellado del desierto, algo con lo que nos quedamos las ganas de hacer.
Para llegar a los kaluts desde Kermán la opción más económica (después del dedo) es compartir un taxi entre varios ida y vuelta. A nosotros dos solos nos costó 5.000.000 de rials (aprox 100 USD) que habría quedado a la mitad si hubieramos encontrado otros acompañantes. La otra manera barata si no tenés acompañantes y contás con tiempo es tomando un micro compartido (savari) desde la calle Imam Khomeini (Kermán) hasta Shahdad (poblado más cercano a los Kaluts) y allí negociar un taxi compartido.
Mapa de Kerman
En este mapa encontrarás marcados todos los puntos del artículo haciendo zoom sobre la ciudad correspondiente.
Hasta aquí nuestro resumen del viaje por Irán. Siempre buscamos ser honestos con nuestras impresiones y esperamos encuentres útil la información. Cualquier duda o sugerencia te leemos en los comentarios.
